Filas interminables por arroz en Emapa: compradores limitados a una arroba al mes

Desde la madrugada, las filas en las tiendas de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) no cesan, a medida que los ciudadanos buscan arroz a precios accesibles. En un contexto donde el precio del arroz ha aumentado hasta un 50% en los mercados locales, los compradores informan que la venta en Emapa está limitada a una arroba por persona al mes.

Este viernes, al menos 30 personas aguardaban en la sucursal de la calle Camacho, en La Paz, buscando obtener este alimento básico. Las filas también se forman durante la noche y en las primeras horas del día, evidenciando la demanda insatisfecha de los ciudadanos.

Los compradores expresan su frustración ante esta restricción, que consideran insuficiente para cubrir las necesidades de sus familias. Muchos ven en Emapa la única opción viable para conseguir arroz a un costo razonable, especialmente dado el aumento de precios en otros lugares.

El gerente general de Emapa, Franklin Flores, reportó que en septiembre los clientes demandaron 8.500 toneladas de arroz de las 11.000 disponibles en sus tiendas, donde cada bolsa arrobera se vende por Bs 50,50. Flores también mencionó que la empresa estatal cuenta con una reserva estratégica de 76.000 toneladas de arroz, asegurando que habrá suficiente grano a finales de año. Sin embargo, esta afirmación contrasta con la perspectiva del sector arrocero.

Baja producción
A pesar de los reportes gubernamentales sobre contrabando y especulación, la Federación Nacional de Cooperativas Arroceras (Fenca) atribuye el aumento del precio del arroz a la baja producción. Gonzalo Vásquez, expresidente de Fenca, aclaró que la escasez se había previsto desde el inicio de la siembra, debido a problemas como la sequía.

En la presente gestión, de las 120.000 hectáreas proyectadas para Santa Cruz, solo se sembraron 80.000, lo que marcó un primer aviso. Además, los rendimientos de la cosecha fueron bajos, lo que llevó a pronosticar una falta de este producto en la canasta familiar hacia fin de año, con una nueva cosecha prevista para febrero de 2025.