FMI proyecta para Bolivia una inflación del 15,1% en 2025, más del doble de la cifra estimada por el Gobierno
El FMI prevé una inflación del 15,1% para Bolivia en 2025, muy por encima del 7,5% proyectado por el Gobierno en el Presupuesto General.
La economía boliviana enfrenta un preocupante panorama inflacionario para 2025, según el más reciente informe “Perspectivas sobre la Economía Mundial” publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI), que proyecta una inflación del 15,1% en el país, una de las más altas en la región.
Este pronóstico contrasta drásticamente con la previsión oficial del Gobierno boliviano, que estimó en el Presupuesto General del Estado (PGE) una inflación del 7,5% para el mismo periodo.
La alerta se suma a los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que reportó una inflación acumulada del 5% hasta marzo de este año. “Esta inflación acumulada es la más elevada en los últimos 33 años. De hecho, es superior a la inflación total registrada entre 2015 y 2023”, advirtió el analista económico Carlos Romero. Agregó además que “representa ya el 50% de toda la inflación del 2024”.
A esto se suma la presión por un aumento salarial. La Central Obrera Boliviana (COB) ha solicitado un incremento del 15% al salario mínimo nacional y del 20% al haber básico. Sin embargo, el sector empresarial ha expresado su rechazo, advirtiendo sobre los riesgos de una medida considerada excesiva en un momento de crisis económica.
La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) emitió un comunicado manifestando su “profunda preocupación por las consecuencias de un aumento salarial imprudente”, al señalar que podría disparar la inflación, aumentar el desempleo y provocar el cierre de muchas empresas.
En la misma línea, el economista Gonzalo Chávez advirtió que un incremento salarial en este contexto podría generar un alza de precios generalizada, reduciendo la competencia y agravando la crisis económica nacional.
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