Bermejo exige la compra urgente de transformadores para restablecer la energía
El bloqueo en Bermejo exige la compra de transformadores de energía para restablecer el servicio, afectando salud, producción y comercio, con grandes pérdidas económicas.
Desde la medianoche del lunes 21 de octubre, Bermejo ha sido escenario de bloqueos organizados por el Comité Cívico, en protesta por la falta de energía eléctrica que afecta la región desde el pasado viernes. Víctor Sánchez, presidente del Comité Cívico de Bermejo, informó que las protestas buscan la intervención de las autoridades departamentales y nacionales para la compra urgente de dos transformadores de 25 megavatios, que permitirían restablecer el suministro eléctrico.
La situación es crítica, afectando sectores clave como la salud, el comercio de productos perecederos, la producción alimentaria y la actividad bancaria. El corte de energía ha obligado a los productores a rematar sus productos para evitar pérdidas mayores. "Los medicamentos y alimentos que requieren refrigeración se están echando a perder, generando grandes pérdidas económicas", declaró Sánchez.
Los bloqueos se han instalado en puntos estratégicos, incluyendo el Puente Internacional, La Colonia, San Antonio y las instalaciones de Setar, exigiendo la presencia de autoridades antes de las 4 de la tarde para ofrecer una solución definitiva.
La falta de energía también ha afectado a comunidades vecinas como Padcaya y Mamora, exacerbando la crisis. Servicios Eléctricos de Tarija (Setar) intentó activar la turbina KV-7, pero la falta de gas impidió su funcionamiento adecuado, dejando a Bermejo sin una fuente estable de energía. "Necesitamos una solución urgente y definitiva", enfatizó Sánchez, quien recordó que la adquisición de un transformador ha sido solicitada desde la gestión pasada, pero ha sido retrasada por diferencias políticas.
Bermejo, a pesar de ser un importante contribuyente de regalías al país, sigue siendo una de las últimas regiones en beneficiarse del Sistema Interconectado Nacional (SIN), lo que ha profundizado el malestar en la región.
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